Un bono no es más que un pedacito de deuda, esto es, un dinero que se ha prestado y que deberá ser devuelto junto con el pago de unos intereses en un plazo determinado. Del primer bono que se tiene constancia data del siglo XII, emitido por el Banco de Venecia, aun así es muy probable que el concepto y su uso procedan de muchos siglos antes.
Pese a que a grandes rasgos los bonos no han cambiado a lo largo de la historia, sí hay algunas diferencias. Los productos de inversión en deuda han crecido mucho y se pueden encontrar de formas muy diferentes en función, por ejemplo, de lo que financian, como los bonos verdes, la preferencia de los pagos, Senior, el riesgo, yield, o sus referencias, fondos de bonos indexados o referenciados. Éstos últimos son muy interesantes porque son un instrumento de inversión perfecto para los inversores más conservadores. Si quieres saber más acerca de ellos, sigue leyendo.
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Toggle¿Qué son los fondos de bonos indexados?
Los fondos de bonos indexados son aquellos títulos de renta fija que tienen como referencia un índice, que suele ser la evolución de una determinada magnitud macroeconómica como la inflación, el más común, el crecimiento del PIB del país en cuestión o la evolución de una moneda. Su característica principal es que buscan ayudar tanto al inversor como al pagador cuando la situación económica cambia. De hecho, históricamente han sido utilizados por países en desarrollo, pero su popularidad ha hecho que otras regiones ricas como España o Estados Unidos tengan los suyos.
Tipos de fondos de bonos indexados
Como has podido comprobar, hay tantos tipos de fondos de bonos indexados como referencias a las que poder ligarlos. No obstante, los más importantes son:
- Bonos indexados a la inflación: aquellos cuyos rendimientos se ajustan a la inflación. Son los más usuales y utilizados en los países desarrollados por sus virtudes para ayudar a las carteras de ahorro e inversores.
- Bonos indexados al PIB: se ajustan al crecimiento del PIB, eso hace que el país en cuestión tenga siempre capacidad para pagarlos.
- Fondos de bonos ligados a Commodities: estos bonos siguen productos básicos (commodities), como por ejemplo, el petróleo, arroz, carne o electricidad. Obviamente, se utilizan en países poco desarrollados.
- Bonos Indexados a Divisas (o Duet Bond): otra forma de ajustar el riesgo a la inflación, esto se consigue al cobrar los rendimientos en una divisa diferente a la del país emisor.
Beneficios de invertir en bonos indexados
Los fondos de bonos indexados tienen diferentes beneficios tanto para el inversor como para el pagador. Así, por ejemplo, cobrar en moneda extranjera nos permite no perder poder adquisitivo en caso de que la moneda del país en cuestión este muy devaluada. En el caso de los bonos indexados al PIB, la ventaja es para el pagador, ya que en ambos casos su capacidad de pago no se ve mermada, aunque eso suponga que el propietario del bono pueda ver como pierde valor.
Pese a que todos tienen sus características, los más importantes para los inversores son aquellos ligados a la inflación. También son los más populares. Estos bonos funcionan de modo que los pagos del principal y los intereses suben o bajan, reflejando la variación de la tasa de inflación. Con ello, se consigue evitar uno de los grandes miedos de todos los inversores, como es que la inflación se coma los ahorros, son una protección natural.
Así nos protegen los bonos indexados a la inflación
Para entender el efecto corrosivo de la inflación, y por qué los fondos de bonos indexados funcionan tan bien, hay que tener clara una cuestión vital: el tiempo. Por norma general, el largo plazo es un aliado para los inversores, gracias al efecto del interés compuesto. De hecho, en la propia fórmula, el tiempo (medido como t) es una potencia, por lo que su efecto sobre el capital final es exponencial. No obstante, a cada año que pasa la inflación se queda una parte del pastel, incluso cuando es baja. Así, si tomamos una inflación del 2,5% en 10 años, lo que antes costaba 100 euros, ahora nos costará 128.
Lo anterior, obliga a los inversores a protegerse de la inflación. Eso se puede conseguir invirtiendo. No obstante, en muchas ocasiones la rentabilidad de los bonos no puede ser como la inflación, como hemos visto recientemente, o incluso la renta variable puede bajar, haciéndonos perder todavía más capacidad de consumir. Por ello, los fondos de bonos indexados son una buena solución a todos estos problemas, además, de ser muy seguros.
Cómo invertir en fondos de bonos indexados
Para invertir en fondos de bonos indexados hay que tener dos cosas en cuenta: la primera, es ser conscientes de qué tipo de bono indexado nos conviene más. En nuestro caso, probablemente el que más nos beneficia son los indexados a la inflación procedentes de nuestra región, ya que así nos aseguramos compensar el crecimiento de los precios. Por suerte, el Tesoro español, y otros muchos países con economías desarrolladas, los lleva emitiendo desde hace décadas.
La segunda parte es dónde nos conviene adquirirlos. En este caso, no es recomendable ir directamente a una subasta del tesoro y comprarlos, de hecho, muchas veces solo pueden hacerlo los inversores institucionales. Sin embargo, es mucho más cómodo hacerlo a través de fondos indexados que podemos encontrar en plataformas de inversión de fácil acceso. Con ello, no solo protegemos nuestros ahorros, sino que también lo hacemos a un coste muy pequeño, ya que este tipo de plataformas se caracterizan por ello.
Invertir en fondos de bonos indexados a través de inbestMe
La plataforma inbestMe destaca como una de las opciones más interesantes para invertir en este tipo de productos. La firma lleva operando en España desde 2017 y ofrece un enorme abanico de productos de inversión, entre los que se encuentran productos y carteras ligados a estos bonos. Así, cualquier inversor podrá incorporar este tipo de activos de manera fácil y sencilla, de tal manera que sus ahorros no solo crezcan, sino que también nunca pierdan poder adquisitivo ni ahora ni en el futuro. Por todo ello, si estás interesado, lo mejor es que te pongas en contacto con inbestMe y empieces desde ya mismo.
Por último, ten en cuenta que la plataforma no compra directamente esos bonos, sino que se incorporan a las carteras, en función de cada perfil, tramos de este tipo de productos (siguiendo un índice o un fondo paralelo), lo que permite beneficiarse de sus virtudes y reducir los costes.