En el mundo de las finanzas, descubriremos por qué invertir en depósitos bancarios no es la opción más rentable ni beneficiosa.
En el reino animal existe un gran número de individuos que tratan de mantener a salvo sus bienes, que en muchas ocasiones son alimentos. Los leopardos suben a sus presas recién cazadas a los árboles, las hormigas se pasan el verano recolectando todo tipo de comida, que esconden en sus hormigueros bajo tierra, para luego pasar el invierno, incluso los hay que lo guardan en su propia boca, como los roedores.
Pero obviamente, ninguno es tan refinado como el ser humano. No solo porque sus formas para guardar los alimentos no tienen parangón, sino porque se asegura guardar sus pertenencias de valor mucho más tiempo del que pueden durar los alimentos a través del dinero y el ahorro, de tal manera que se asegura alimento (y bienes) futuros. Eso sí, las formas de guardar ese dinero son muy diversas, ya que van desde los depósitos a las cuentas o, en algún caso, el colchón donde dormimos. Además, tenemos la posibilidad de multiplicar esos bienes por el simple hecho de tenerlos.
¿Qué es un depósito bancario?
En términos estrictos, un depósito bancario es un producto de ahorro en el que el cliente entrega una cuantía (o la deja depositada) en una entidad financiera y a cambio recibe una remuneración. Se podría decir, que un depósito bancario es como un pequeño préstamo que hace el cliente al banco y por el cual recibe un beneficio. Aquí conviene matizar que el término depósito es mucho más general que lo que conocemos actualmente, ya que los hay de dos tipos.
Depósitos a plazo
Los más conocidos son los depósitos a plazo fijo, en los que el cliente deja su dinero inmovilizado en el banco durante un tiempo acordado con la entidad y que recibe a cambio remuneración que es sabida de antemano. Aquí, lo más importante es que el dinero tiene limitada su disponibilidad. Por ello, las rentabilidades que ofrecen son mayores que otros productos y cuanto mayor sea el plazo del depósito mayor será la rentabilidad.
Depósitos a la vista
Probablemente, no sepas bien qué son los depósitos a la vista, pero seguramente tengas abierto más de uno. La razón es que las cuentas corrientes, nómina o de ahorro se conocen técnicamente así, por lo que ya te habrás hecho una idea de qué son. Las características de las cuentas o depósitos a la vista son que el titular puede disponer plenamente del dinero depositado en el banco en cualquier momento. A cambio, la entidad puede ofrecer una remuneración o no, en forma de un interés en función del dinero depositado. Además, la entidad en cuestión está obligada a darte un servicio de caja.
Los depósitos frente a otros productos financieros
Pese a que los depósitos son los productos de ahorro más conocidos, ya sean a plazo o a la vista, no son ni los más rentables ni tampoco los mejores para ahorrar. En pocas palabras, son los NiNis de las finanzas.
La razón es sencilla: en sus dos versiones presentan una serie de limitaciones, ya sea en rentabilidad o en la disposición del dinero que otro tipo de productos, como las carteras de ahorro, no tienen. Al fin y al cabo, estas últimas ofrecen en la actualidad una rentabilidad mayor al mismo tiempo que tienes siempre disponible tu dinero para invertir o gastarlo en lo que quieras.
¿Rentabilidad o disposición del dinero? Las limitaciones de los depósitos
La gran disyuntiva es qué prefieres para tus ahorros: ¿Una mayor rentabilidad? O ¿Disponer de ellos siempre que quieras? Así, los mejores depósitos del momento en cuanto a rentabilidad son todos ellos a plazo y tienen la particularidad de que no podrás tocar tu dinero. De hecho, según los últimos datos del Banco de España, la rentabilidad media de los depósitos a plazo es del 2,22% frente al 0,12% de los depósitos a la vista.
Pero esa necesidad de elegir entre una u otra opción no es el único punto débil de los depósitos. Otro importante, ligado con la disponibilidad del dinero, es que muchos productos actualmente no solo te penalizan si cancelas el depósito antes del plazo pactado, porque necesites tus ahorros, sino que incluso en algunos casos no podrás acceder a ellos. Otro problema, relacionado con los depósitos a la vista, es que a pesar de tener tu dinero en el banco (que obviamente se aprovecha de ello) en algunos casos puede cobrarte comisiones por él, si no aceptas vincularte con la entidad en cuestión.
Rentabilidad y libre disposición de tus ahorros: las carteras de ahorro
Para el cliente medio español, la banca parece haberle relegado a asumir que no tiene una alternativa a la disyuntiva anterior, pero eso es totalmente falso. En la actualidad, existen productos que combinan ambas cualidades, ofreciendo, además, una mayor rentabilidad por los ahorros.
Toma, por ejemplo, el caso de inbestMe y su Cartera Ahorro, con la que no solo tienes libre disposición para usar tu dinero como creas conveniente, sino que además te ofrece una remuneración del 3,50% TIR (Tasa Interna de Retorno) (datos de noviembre 2023, consulta la TIR actualizada en nuestra web) por el saldo que tengas en ella. Esa cifra es mucho más de lo que ofrecen de media los depósitos a plazo y los depósitos a la vista, pero con características similares en cuanto al uso del dinero.
Más acerca de la Cartera Ahorro de inbestMe
La alta remuneración o la total disponibilidad de tu dinero no son las únicas características importantes de la Cartera Ahorro de inbestMe (que puedes contratar aquí), ya que puedes incrementar la remuneración que obtendrás si el Banco Central Europeo sube los tipos de interés, como podría hacer próximamente. También cuentas con todas las garantías posibles para tu dinero, por el hecho de que inbestMe está respaldado por el Fondo de Garantía de Inversiones en España (FOGAIN). Por último, no tienes límite de capital o de permanencia en la cuenta, por lo que podrás abrirla y beneficiarte de ella el tiempo que quieras.
En definitiva, la evolución de los seres vivos nos ha llevado en muchos casos a proteger nuestros bienes de la manera más eficaz, como demuestra el mundo animal. Sin embargo, pese a que los humanos contamos con las mejores opciones, muchas veces nos limitamos a lo sencillo, lo que nos ofrece nuestro banco de toda la vida. Pero no tiene por qué ser así, ya que la proliferación de plataformas como inbestMe, que lleva ya un lustro de vida, y sus productos innovadores nos permite sacar el máximo rendimiento a nuestros ahorros a la vez que siempre podemos disponer de ellos. ¿Por qué elegir menos pudiendo tener más?
