Las carteras de fondos indexados son un tipo de producto financiero que tienen cada vez más acogida entre los inversores, especialmente entre los pequeños ahorradores. Combinan la sencillez de los fondos indexados con la mayor diversificación que supone una cartera con más activos.
Pero ¿sabes en qué consisten las carteras de fondos indexados y qué ventajas tienen? A continuación, te explicamos todos los detalles.
Qué es una cartera de fondos indexados
Una cartera de fondos indexados es un producto financiero que está compuesto por fondos indexados. Es decir, por fondos que replican el comportamiento de un determinado índice, como el Ibex, el S&P 500 o el Eurostoxx, entre muchos otros. En cierto modo, es un fondo de fondos, pero pensado para fondos indexados.
Es un tipo de instrumento que permite conformar una cartera adaptada al perfil de cada inversor, aunando los beneficios de los fondos indexados, como bajos costes, sencillez o diversificación, con las posibilidades que ofrecen los fondos de inversión, como la posibilidad de invertir en varios fondos al mismo tiempo o sus ventajas fiscales.
Las carteras de fondos indexados suelen ser el tipo de producto más habitual utilizado por los roboadvisors, y también por los inversores particulares, que utilizan los fondos indexados para conformar su cartera.
Ventajas de las carteras de fondos indexados
Las carteras de fondos indexados tienen múltiples ventajas para los inversores, entre las que destacan las siguientes.
Adaptado a perfil de cada inversor
Los fondos indexados replican índices de manera individual, de manera que no todos se ajustan al perfil de riesgo de cada inversor. Por ejemplo, si compras participaciones del S&P 500, serás propietario de todas las acciones que componen ese índice, pero no tendrás ningún valor de renta fija.
Sin embargo, con una cartera de fondos indexados, y dado que se invierte en varios productos al mismo tiempo, se puede invertir ajustando mucho más el riesgo, ya que podrás combinar productos de renta variable y renta fija
Mayor diversificación
Cuando se invierte en varios fondos indexados al mismo tiempo, aumenta la diversificación global de la cartera, tanto con respecto a categoría de activos (renta fija, renta mixta, renta variable…), como también a nivel sectorial (tecnológico, industrial…) y geográfico (Europa, Japón, Estados Unidos…).
Por ejemplo, con una cartera de fondos indexados que invierta en un fondo vinculado al S&P 500, otro al Eurostoxx y otro en bonos europeos ligados a la inflación, estarás invirtiendo en Estados Unidos y en Europa, pero también en renta fija y variable.
Rebalanceo de pesos
Una de las acciones más comunes en las carteras de fondos indexados son los rebalanceos de pesos de la propia cartera. Es una práctica que consiste en devolver la cartera a sus porcentajes originales, para que se ajuste al perfil del inversor, vendiendo aquellos fondos que hayan aumentado su valor y comprando los que hayan caído, reajustando la cartera.
El rebalanceo permite de forma automática vender caro y comprar barato. De hecho, hay estudios que demuestran que el rebalanceo de una cartera puede llegar a añadir alrededor de un 0.5% adicional anual, respecto a una cartera que no se rebalancee. Además, esta práctica es especialmente interesante en los fondos de inversión, ya que los traspasos entre fondos están exentos de tributación.
Menor seguimiento de la cartera
Las carteras de fondos indexados permiten al inversor vivir más tranquilo, puesto que, en líneas generales, no exigen un seguimiento demasiado exhaustivo. De hecho, y dado que son productos automatizados y pensados para el largo plazo, ni siquiera es necesario revisar periódicamente la situación de la cartera.
Tan solo debes lanzarte a invertir y olvidarte.
Cómo se invierte en una cartera de fondos indexados
La mayoría de brókers permiten invertir en carteras de fondos indexados de forma sencilla, ya que suelen instrumentalizarse a través de gestores automatizados de inversiones, también conocidos como robo advisors. Por lo general, los robo advisors están compuestos por fondos indexados, aunque también pueden contener otras categorías de instrumentos, como ETFs.
Gracias a los robo advisors, cualquier inversor, por novato que sea, puede invertir de manera sencilla. Tan solo tendrá que responder a unas preguntas sencillas sobre su perfil de riesgo, y se determinará qué cartera de fondos indexados es más adecuada para él. A partir de ese momento, la inversión es totalmente automática, incluyendo las aportaciones periódicas.
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