Durante los últimos días, un aumento en los casos de Coronavirus (COVID-19) en todo el mundo ha llevado a los mercados globales a corregir ante la expectativa de que una mayor propagación de la enfermedad (llegando incluso a considerarse pandemia) podría dañar el crecimiento futuro mundial.
El crecimiento de los casos reportados fue especialmente preocupante en Irán, Corea del Sur, Japón e Italia. La propagación del virus en Italia aumentó las preocupaciones de que haya comenzado una segunda fase de difusión en la que los países occidentales también podrían verse afectados.
El lunes, los mercados bursátiles borraron las ganancias que habían acumulado a lo largo del presente año, debido a que los inversores han migrado a clases de activos considerados como «seguros», como los bonos del gobierno y el oro. Esto hace que dichos activos sean los claros ganadores de estas primeras semanas de 2020.
¿Y si hay pandemia?
La primera impresión es que las preocupaciones por la pandemia en sí misma son algo exageradas, pero es innegable que el pánico muchas veces produce que determinadas acciones de las autoridades, empresas y consumidores tengan un impacto económico muy real, especialmente a corto plazo.
En el caso de Italia, por ejemplo, la epidemia ha afectado a las regiones del noreste, que representan más del 50% del PIB del país. El cierre de fábricas y actividades comerciales en estas regiones afectará el ya de por sí anémico crecimiento económico italiano.
Por todo lo anterior, a corto plazo la incertidumbre causada por la propagación del virus podría tener algún impacto material en la economía. Sin embargo, a medio y largo plazo, es probable que un mayor deterioro económico desencadene una respuesta global en términos de medidas fiscales coordinadas para reactivar el crecimiento económico.
Si observamos el caso de China vemos que después de un pánico inicial, parece que ahora la expansión del virus está más controlada, ya que los casos reportados han dejado de crecer. Este hecho, junto con los estímulos monetarios y fiscales masivos del Banco Central y el gobierno chino, hizo que los mercados bursátiles se recuperaran, a un nivel no muy lejos de los máximos alcanzados antes del inicio del susto del Coronavirus.
¿Que puede pasar en los próximos meses?
Durante los últimos años, los mercados financieros han sido muy sensibles a los estímulos de los bancos centrales en forma de bajadas de tipos de interés o de programas de compra de activos. Esto es lo que ha permitido a los mercados financieros chinos recuperar el terreno perdido y es probable que esto también suceda en Europa.
Esperemos que también sigan medidas fiscales muy necesarias para la economía en estos momentos.
De todos modos, como siempre, lo más importante cuando ocurren eventos inesperados como este, es ser disciplinado y apegarse al plan, sin dejar que las emociones nos dominen. El peor error que pueden hacer los inversores individuales es decidir sobre la base de movimientos del mercado a corto plazo, los cuales no tienen impacto en las perspectivas a largo plazo. Otros eventos similares ocurridos en el pasado no dejaron ningún efecto duradero en la economía (pensemos en el episodio del SARS de 2003, por ejemplo).
Por supuesto, la incertidumbre está aquí para quedarse por un tiempo, y nuestro Comité de Inversiones monitorea constantemente la situación. En relación con esto el comité podría decidir, en las carteras Dynamic, proteger a nuestros clientes tanto como sea posible si la situación se deteriora drásticamente, pero por el momento parece que estamos aún en el contexto de la volatilidad normal del mercado.
Debemos recordar que todas nuestras carteras ya están diseñadas para hacer frente a situaciones tan inesperadas. Al evaluar el perfil de riesgo de los clientes, ya tenemos en cuenta que habrá algunos períodos volátiles durante la vida útil de las carteras. A los inversores solo se les asigna el riesgo que puedan soportar psicológica y financieramente, incluso teniendo en cuenta períodos difíciles como este.
Por eso, en inbestMe recomendamos seguir con tu plan a largo plazo sin importar lo que ocurre en el mercado a corto plazo.
