Pon la suerte de tu lado

Aprende a invertir con las cartas marcadas.

Recientemente vimos la película «21 Blackjack» basada en una historia real: seis estudiantes del MIT (Instituto Tecnológico de Massachussets) situado en Cambridge, Massachussets, cerca de Boston, son entrenados para convertirse en expertos para contar cartas, lo que les permite ganar millones de dólares en los casinos de Las Vegas.

No somos los únicos, buscando información sobre el tema encontramos un artículo dónde el autor también utiliza el caso.  Y es que, aunque la película no ha pasado a la historia como una de las mejores (el libro «Bringing Down The House» no sé si es mejor),  hay algunas lecciones de este caso (basado en hechos reales),  que vale la pena considerar.

El jefe del equipo (Profesor Rosa o el actor Kevin Spacey) inculca a sus alumnos elegidos, un sistema de contar y de señales que les hace poner «la suerte de su lado». Pero en realidad no se trata de poner la suerte sino más bien aumentar las probabilidades de éxito, creando un proceso para aumentar la posibilidad de ganar lo suficiente para hacer de todo ello un sistema que funciona, solo, a lo largo de toda una larga noche de apuestas. El profesor también dedica un buen tiempo a aleccionar a sus pupilos a saber superar la presión y evitar las emociones.  Ese sistema se tiene que repetir en sucesivos fines de semana (o periodos) para poder acumular ciertas ganancias.

Hacia la mitad de la película, hay un punto culminante cuando el «big player» del equipo (Ben) y el que acostumbra a ser el responsable de las mayores ganancias, pierde el control y todo el dinero del fin de semana.

Es ahí dónde Kevin sermonea a su alumno predilecto:

«Te dejaste llevar por las emociones!».» No estabas contando, estabas jugando!»

Al dejar de contar (aplicar el sistema) se deja llevar por las emociones y empieza a jugar como cualquier otro jugador expuesto totalmente al azar y este juega a favor de «la casa» que por algo los casinos son un negocio. En otra de sus críticas el profesor le dice:  «esto es un «business» y no un juego»!

Las analogías son evidentes con el mundo de la inversión. El inversor de éxito es aquel que no se deja llevar por las circunstancias del mercado especulando y aplica un método que aumenta sus probabilidades de ganar. No hay un único método, hay múltiples métodos que nos pueden resultar exitosos en el mundo de la inversión, unos más que otros, pero todos requieren cierta sistemática y sobre todo tener la disciplina de aplicarlos pase lo que pase con los mercados, teniendo la paciencia de que el sistema escogido, en cierta forma, «madure».

La gran diferencia es que en los mercados los sistemas «maduran» en un periodo algo más largo que una larga noche. Cuantos más años de inversión más son las probabilidades de tener retornos positivos, En el gráfico anterior (extraído del libro «A Random Walk Down Wall Street» de Malkiel, Burton G.) podemos observar como el retorno medio de una inversión en acciones se sitúa en el 10%. Pero lo más interesante es que:

  • A partir de 5 años el rango de retornos negativos se reduce al 2,5%mientras que por la parte superior los retornos positivos pueden alcanzar el 19,7%.
  • A partir de más de 10 años el rango de retornos negativos desaparece y el rango de retornos es siempre positivo (por ejemplo en 15 años del 4,2% al 19,1%).

Eso sí, en el corto plazo estamos expuestos a un rango muy amplio (-37%/+53%)

Es pues invirtiendo en el largo plazo dónde el inversor pone «la suerte de su lado». Igual que en la película el equipo del MIT necesita una larga noche, es en el largo plazo dónde el inversor pone las probabilidades (no la suerte) a su favor.  A partir de los 5 años esa probabilidad se va decantando a favor del inversor y es a partir de los 10 dónde esa probabilidad juega totalmente a su favor.

Podemos ver el porqué en el gráfico de más arriba. A pesar de guerras, crisis, y múltiples calamidades, el PIB mundial sigue subiendo y seguirá subiendo (el gráfico representa solo el de EE.UU). En ese gráfico todos esos eventos negativos (más o menos largos) se ven como puras anécdotas, incluida la última crisis financiera del 2008-09.

A partir de los 10 años el inversor empieza a jugar con las cartas marcadas ya que tiene a su favor la tendencia natural alcista de la economía y por tanto la de los mercados:  las probabilidades  están pues, del lado del inversor paciente y de largo plazo. Es ahí dónde el sistema seguro que funciona, y el inversor encontrará  el soporte de esa tendencia segura, sobretodo si es recurrente (tal como en la película) e invierte en diferentes periodos.

Aun así, la mayoría de la gente sigue buscando «su pelotazo» o las formas fáciles y rápidas de hacer dinero. Basta con mirar el interés que despertó la película, que recaudó $157 Millones multiplicando por 5 su costo de $35Millones: no está mal por ser una película con una valoración moderada.

No nos dejemos «pillar» (como en la película) por esos métodos infalibles que nos prometen hacer dinero fácil y rápido,  eso solo funciona a veces o en las películas. Es mejor tener de nuestro lado una carta segura: la del tiempo. 

Sin embargo el tiempo no lo es todo: la película nos enseña que tener un buen sistema y disciplina mental es también importante:  si no prueben a contar y a jugar a la vez al blackjack, y verán que no es tan fácil.